Existen dos principales fuentes de energía para generar calor cuando se fabrica cerveza: el gas y la electricidad. Ambas tienen sus ventajas y desventajas, y en el artículo de hoy intentaremos resumir los puntos más importantes para tomar en cuenta al decidir cuál método usar en tu cervecería.
Gas
El gas es una de las formas más usadas para calentar el agua en nuestros hogares, y cuando se trata de hacer cerveza no es la excepción. Por lo general, el gas resulta relativamente barato por litro. Sin embargo, fabricar cerveza con un quemador de gas es altamente ineficiente, ya que se pierde de 50% a 75% del calor generado. Además, existe el riesgo de quedarse sin gas a la mitad de la elaboración.
Por otro lado, utilizar gas permite un calentamiento mucho más rápido, acortando el tiempo de producción.
Electricidad
Utilizar un calentador de resistencia eléctrico es el método más eficiente de calentar el agua, ya que se aprovecha hasta más del 95% del calor generado. Sin embargo, es necesario analizar si tienes suficiente corriente para los calentadores más potentes, e instlar una serie de medidas de seguridad adicionales.
El costo es bastaante bajo, considerando la tarifa de luz de nuestro estado. Por otro lado, muchos cerveceros están de acuerdo en que es un proceso más lento, pero esto permite un control de temperatura más específico.
Realmente, los dos métodos son utilizados de acuerdo a las preferencias personales, pero si lo que te importa es la eficiencia y los bajos costos,entonces definitivamente utilizar un calentador eléctrico es la mejor opción.
TheBeerLabTeam